Ayer tocó día de limpieza en mi departamento. Para ser hombre que vive solo siempre me jacto de vivir bien, en casa cómoda y sobre todo en casa limpia. Pero no se crean, no es que sea el hombre mas ordenado del mundo, al contrario, siempre que llego a casa dejo todo tirado por lo que hay una persona que limpia mi casa tres veces a la semana. A lo que iba, hace un par de semanas la señora que normalmente va a hacer la limpieza no ha podido ir por que anda de viaje y hay una chica, muy joven que al reemplaza. Ella solo puede limpiar en mi casa el domingo nada más. Así que ayer me tocó muy temprano la puerta y cuando abrí la vi a ella con sus escobas y sus trapeadores preparado a para limpiar. La hice pasar y fui a cambiarme de ropa. Cuando salí, la chica ya había empezado con su faena en la cocina. Fui a prepararme algo para desayunar y le pregunté a la chica si había comido algo, a lo que me dijo que no. Entonces mientras ella limpiaba hice un par de tortillas, café para ella y jugo para mi y la invité a sentarse conmigo a la mesa. Se sentó y me puse a conversar con ella. Yo ya sabia que tenia un hijo que estaba enfermo, me lo había

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