Thomas Elliot, - Canto de Amor - Fragmento
Vayamos pues, tú y yo, cuando la tarde se haya tendido contra el cielo como un paciente eterizado sobre una mesa; vayámonos a través de ciertas calles semidesiertas, murmurantes asilos de inquietas noches en hoteles baratos de una noche y restoranes con serrín y ostras; calles que se siguen como una discusión tediosa de intención insidiosa para llevarte a una cuestión abrumadora… Oh, no preguntes “¿Qué es?” Vayámonos a hacer nuestra visita. ...... ...... ¡No! No soy
Hay 189 palabras más en este escrito, para seguir leyendo debe identificarse
Me siento Abrumado.