Por: Areli García Alarcón Estimado lector, me permito enumerar una serie de difíciles pero “efectivísimas” recomendaciones para evitar llegar a formar parte de la lista negra de sus reuniones familiares. Nota: Si por algún motivo este enliste resultara ineficaz, le recomiendo consultar el listado de “Reglas para aventarse de un puente después de una reunión familiar” que sin duda estaré muy próxima a escribir. Pero sin mas preámbulo comencemos: 1.- Procure confirmar la asistencia por lo menos unos cuantos días antes, no debemos olvidar que nuestro hábil círculo familiar jamás olvidará invitar, a la Tía “Chonita” a doña “Petrita” la de la tienda, a la señora que acompaña a la abuelita de la familia a las tortillas, y cualquier sequito de anexos, conocidos y demás seres que se hayan cruzado por el camino de nuestros parientes. Éste punto es de vital importancia pues como no han de olvidar, las reuniones familiares suelen ser de “traje” y no precisamente haciendo alarde a las prendas de vestir mas exclusivas, sino, haciendo énfasis a la cooperación -voluntariamente forzosa- que llevaremos como presente para la reunión, es entonces que al confirmar nuestra asistencia, no nos veremos opacados al llegar con nuestro “towpercito” de comida, con respecto a la cazuela enorme de guisado que llevó cualquier otro integrante de la familia. 2.- Evite poseer cualquier aptitud artística sobresaliente y en caso de tenerla, evite mencionarla antes, durante, y mucho menos cuando, los tíos, abuelitos, padres, etc. Hayan ingerido más de tres vasos de bebida alcohólica. Pues sin dudarlo y como un golpe certero a nuestra pena, nos pedirán interpretemos el baile, canto, chiste, dialogo, o cualquier otra representación que implique la atención de más de una persona en publico y nos lo pedirán de tal forma,

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