De cómo reparar un corazón roto
Así es... después de darle tantas vueltas al asunto, hoy te encuentras contigo mismo, en este atardecer espectacular, como el que te regalé alguna vez, y a fin de cuentas terminas por reconocer que un corazón está roto. Y no, no es el tuyo ni es el mío... es el que solía ser de los dos... Hazme el favor de
Hay 169 palabras más en este escrito, para seguir leyendo debe identificarse